La ética del comportamiento es el estudio de porqué las personas toman las decisiones que toman, ya sean decisiones éticas o no. Esta línea de investigación se da en campos como la psicología del comportamiento, la ciencia cognitiva y la biología evolutiva.
La ética del comportamiento es distinta a la filosofía tradicional. En vez de preocuparse de cómo la gente se debe comportar, la ética del comportamiento se enfoca en porqué las personas actúan de la manera en que actúan. Se puede deducir que es más práctico entender nuestras propias motivaciones que entender la filosofía de Aristóteles.
Estudios en la ética del comportamiento encuentra que las personas no son totalmente racionales. La mayoría de nuestras decisiones éticas se toman de manera intuitiva, tomando en cuenta las consideraciones sentimentales, y no siempre de manera calculada o racional. Normalmente las personas que toman decisiones poco éticas son influidas inconscientemente por los sesgos o prejuicios internos, como el sesgo egoísta, por presiones externas como el conformismo y por factores contextuales de los cuales no son conscientes.
Por lo tanto, la ética del comportamiento busca entender por qué las personas, aun con las mejores intenciones, pueden llegar a tomar decisiones poco éticas.