Este video introduce un sesgo de la ética del comportamiento conocido como la obediencia a la autoridad. La obediencia a la autoridad describe nuestra tendencia a querer complacer a figuras de autoridad. Ponemos demasiado énfasis en esa meta y, consiente o inconscientemente, subordinamos el gol de actuar éticamente. Todos debemos de monitorearnos para asegurar de que no estemos suspendiendo nuestro propio juicio moral para complacer a nuestros superiores. Si estudiantes no están al tanto de esta vulnerabilidad, no pueden combatirla. Muchos criminales de cuello blanco pueden ver que el inicio de su caída empezó por la obediencia a la autoridad. Muchos estudiantes ejemplares son “complacedores” así que ellos saben que tan fuerte es la motivación de complacer a la autoridad.
El “experimento Milgram” ofrece un vistazo a los efectos de la obediencia a la autoridad. El psicólogo Stanley Milgram pretendía descubrir si los norteamericanos eran tan obedientes a la autoridad, como los alemanes lo fueron a Hitler. La pregunta de investigación era si los sujetos participantes darían o no dolorosos electroshocks (fingidos) a otra persona al equivocarse en una prueba (fingida también) de memorización, sólo porque se lo ordenaba una persona vestida con una bata de laboratorio. El supuesto experimento, pretendía demostrar el efecto del refuerzo negativo para mejorar la memorización en una persona. Aún y cuando la gente pensaba que muy pocos participantes norteamericanos mostrarían excesiva obediencia a la autoridad, los resultados fueron los siguientes:
Todos los participantes del experimento de Milgram –que era gente bien adaptada y bien intencionada- aplicaron los choques eléctricos a las víctimas que aparentaban gran dolor, se quejaban de problemas cardíacos o que aún habían (aparentemente) quedado inconscientes. Y más del 60% de los participantes, aplicaron el electroshock al máximo.
Tal vez esto no hubiera sido tan sorprendente si consideramos que los centros nerviosos del placer, se encienden cuando complacemos a la autoridad. Estamos entrenados desde la infancia para complacer a las figuras de autoridad –padres, maestros, y aún al policía del barrio.
La ley y el orden son generalmente buenas cosas, por lo que cierto grado de obediencia a la autoridad es definitivamente algo bueno. Pero si las personas van demasiado lejos y ponen en duda su propio juicio moral, ya sea consciente o inconscientemente, entonces, están en graves problemas…
Las empresas, se dice, pagan a sus empleados por usar su cerebro, su educación y entrenamiento, y su juicio. Pero no reciben a cambio lo justo, si el empleado no utiliza su mejor juicio estratégico, su mejor juicio operacional y su mejor juicio moral, porque los errores en cualquiera de esas tres áreas pueden ser muy costosos.
Para aprender sobre conceptos de la ética del comportamiento relacionados, mire Sesgo del conformismo y Moralidad según el rol.
Términos definidos en nuestro glosario de ética relacionados a este video y casos de estudio incluyen: sesgo del conformismo, obediencia a la autoridad y moralidad según el rol.
La ética del comportamiento toma de los campos de la psicología del comportamiento, ciencia cognitiva, biología evolucionaria y otras disciplinas relacionadas para determinar como y por que las personas toman decisiones éticas o poco éticas. Mucha de la investigación de la ética del comportamiento se enfoca en por que las buenas personas hacen cosas malas. Muchos de los conceptos de la ética del comportamiento son cubiertos detalladamente en Concepts Unwrapped, al igual que en el video Aquí para ganar: La historia de Jack Abramoff. Cualquiera que mire estos videos tendrá una introducción solida al campo de la ética del comportamiento.